vientos de vacaciones...
En Colombia los vientos de agosto son propicios para elevar cometas. Esta práctica milenaria que llegó a Occidente por la ruta con el Oriente, es una perfecta excusa para reunir a propios y ajenos en una actividad que implica destrezas físicas y mentales para garantizar que el artilugio permanezca en el aire. Hoy, Señal Memoria se une a este pasatiempo presentándoles desde cómo hacer una cometa hasta los mejores lugares del país para elevar una.
Las cometas nacieron en China hace 2.000 años, durante la Dinastía Chunqiu (hacia el 453 a.C). Según la tradición, un chino llamado Muo Di se inspiró en un halcón que volaba sin mover las alas, por lo que decidió construir un artefacto que imitara el movimiento del ave y luego de terminado lo dejó volar durante tres días. Tiempo después, Lu Ban, un carpintero del reino Lu, optó por usar palos de bambú en su elaboración, perfeccionando el movimiento de las cometas en el aire.
Durante la dinastía Han, hacia el año 202 a.C., las cometas se usaron con fines militares como una forma de distraer al ejército enemigo, volándolas por encima de las ciudades para evitar que sus rivales combatieran. Con este mismo propósito también se usaron para medir distancias y para pedir ayuda durante la dinastía Nan.
Asimismo, tuvo fines religiosos al incorporarse a la fiesta para honrar a los muertos durante la celebración del Qīng míng. Las personas hacían cometas y escribían sobre ellas nombres de cosas que traían mala suerte. Cuando las cometas volaban alto y ya no se veían, las personas cortaban la cuerda para que desaparecieran como un símbolo de que las enfermedades y la mala suerte se las llevaba el viento.
En Occidente este artilugio volador llegó gracias a los viajes de Marco Polo. El viajero italiano del siglo XIII dio a conocer las comentas en el mundo Medieval, aunque solo cobró relevancia entre los siglos XVI y XVII. A América llegó debido al contacto con el Viejo Mundo, pero se consolidó gracias a la ruta comercial del Galeón de Manila, que permitió conectar al virreinato de la Nueva España con la actual Filipinas.
Lo cierto, es que los que se dedican a elevar cometas más allá del entretenimiento consideran que no solo agosto cuenta con los vientos necesarios para remontar estos artilugios con gran habilidad. Ciudades como Medellín o Cali, donde la brisa es constante, se puede practicar esta actividad en cualquier época del año, eso sí con las precauciones debidas para evitar accidentes. Los demás, podemos aprovechar lo que resta de este mes para buscar una montaña o precipitación cercana y distraernos con este invento oriental.
En nuestra ciudad los sitios insignias para elevar cometas en la estauta de belarcazar y cerro de las 3 crucez donde sus vientos son constantes y fuertes, asi mismo en el el lago calima ya que tienes unos vientos bastantes fuertes...
Cali un lugar ideal para que dejes volar tu niñez interior!!